No sé desde hace cuanto podemos decir que el cristianismo se puso "de moda". Es innegable que las mega-iglesias con fastuosas construcciones, las visiones de igle-crecimiento y el uso de la tecnología en pro del evangelismo, han surtido un efecto, que si positivo o negativo, tú puedes decidir, pero el impacto no se puede ignorar. Y desde que el creer está "In" nos hemos visto sobrepasados por diversos movimientos dentro de la misma iglesia: la música, la televisión, la internet y sus redes sociales, entre otras. La asimilación a estos movimientos no ha sido diferente de otras épocas, simplemente las hemos tomado y les hemos puesto un brillante y reciclado remoquete de "cristiano".
La música "cristiana", la televisión "cristiana", libros, webs, películas, etc., todo lo que hemos asumido y estereotipado a lo "cristiano" hoy nos puede estar pasando una cara cuenta de cobro. Ok, no pienses que estoy contra la música y demás producción hecha por la Iglesia, no. Este es un tema bastante largo y profundo que espero tratar en otra publicación. Hoy quiero entablar una relación entre la mala asimilación y la consecuente indebida aplicación en la vida del creyente común y corriente.
Es obvio que nuestra tarea como creyentes es ir y llevar las buenas nuevas a TODO el mundo, pero el cómo se lleva...ese es un punto clave. Y es que con el boom tecnológico que hemos experimentado en las últimas dos décadas, así como se ha llevado el buen mensaje, también se ha extendido un falso mensaje, un evangelio barato, "light" y diluido.
He aquí la importancia de comentar sobre la mala asimilación de las herramientas hoy usadas por los cristianos, porque aunque la herramienta en sí no tenga nada de malo, si puede ser malo quien la usa, aún el fin para el que se usa aunque quien la use lo haga sin mala intención.
"El fin justifica los medios", decía Maquiavelo y al parecer hoy es la frase de cabecera de algunos "pastores", "apóstoles" y "tele-evangelistas", quienes enseñan a todo el que se cruza por su congregación a declarar, reclamar, anular, imponer, decretar...y tantas otras necedades que procuran una vida sin dolor, libre de males y cualquier problema, con la única intención de adherir fieles a su filosofía y doctrina, que al final no es otra sino aquella que Epicuro promulgara siglos antes de la venida de nuestro Señor.
Claro que hoy no la llamamos hedonismo, nooooo, hoy le hemos cambiado su nombre y la presentamos de diversas maneras como: "prosperidad, sanidad milagrosa, nueva unción"... han tomado verdades escriturales y las han torcido hasta el punto de convertirlas en aberraciones para hacer de su iglesia la mas grande, la mas conocida y hacerse un nombre en este mundo. Tristemente quienes son los directamente afectados somos nosotros, los creyentes del común que vamos a congregaciones permeadas por doctrinas que nada tienen que ver con la verdad de Jesús.
Esta no es una publicación con el fin de denunciar a alguien, de juzgar y señalar personas; mejor aún me gusta pensar que quien lee puede ser liberado del yugo que muchos han querido imponer sobre su vida, haciéndoles creer que si la enfermedad viene es fruto del pecado y no algo común que todo ser humano debe afrontar de la mano del Creador, que si enfrentas una situación económica difícil la única manera de resolverla es "pactando" por "libertad financiera" y nada tiene que ver tu mala administración...en fin enseñando vanas filosofías huecas, provenientes de mentes humanas que trastocan la palabra de nuestro Salvador.
Si notas o ves que tu congregación hoy se encuentra contaminada, no hagas lo que muchos hoy hacen: salirse y montar su propia congregación o convertirse en "cazadores de apóstatas". Te invito a que ores, habla con el dueño de la Iglesia, El y solo El te podrá decir qué hacer, por lo general, como la historia de amor que narra su palabra, nos invita a orar por aquellos que obran de mala manera, que les bendigamos y pidamos por su arrepentimiento; también en definitiva, te puede dar vía libre para que busques otra congregación, aunque por experiencia propia te digo, este es un último recurso, mejor trata de permanecer y convertirte en agente de cambio: sé luz allí donde estés.
Gracias por leer y comentar. Bendiciones!!!!
exelente post amigo saludos
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